Tras décadas de trabajo en ambientes ruidosos (en la industria, la construcción, talleres mecánicos, carpinterías, músicos....), decenas de miles de trabajadores están afectados con pérdidas auditivas, sin declarar, ni cobrar la indemnización por el daño, en tanto los médicos de los Servicios de Prevención, se resisten a cumplir con la obligación de comunicar sospecha de enfermedad profesional, tras detectarlas en los reconocimientos médicos. (klik egin-ver más)
Jesús Uzkudun, asesor y activista de Salud Laboral de CCOO de Euskadi (en Sin Permiso)