Goldaratz, localidad del valle de Imotz, colgada en un altozano sobre el desfiladero de las Dos Hermanas de Irurtzun, es célebre en la actualidad por la oferta gastronómica de su posada, inusual hoy en día. Pero no menor es el atractivo de servir de base para ascender por un camino cubierto de hayas a una poco frecuentada montaña del extremo suroriental de la sierra de Aralar: la rocosa Iruiondi. En sus cercanías, en la confluencia de Imotz y Larraun, está el voluminoso dolmen de Larrazpil, que da nombre a otra cima más adentrada en el bosque que Iruiondi. Más que suficiente para una hermosa excursión montañera.
No hay comentarios:
Publicar un comentario