Se casaba el capitán y Larrate viajó con nueve bajas a Buñuel a visitar a uno de los equipos de la zona alta de la clasificación. Y lo hizo acompañado de un buen número de aficionados, encantados como están con la marcha del conjunto. Un córner mal despejado dio origen en el minuto 54 al gol local. Los de Carcastillo pusieron cerco a la portería del Buñuel, y Miguel Larramendi puso el empate definitivo (1-1) en el minuto 79. Larrate continúa segundo, a cinco puntos del líder Azkoyen, tras seis victorias, dos empates y una sola derrota, ante el Lourdes, en la jornada inaugural. ¿Licencia para soñar? De momento, a disfrutar.
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