Cada día los destrozos vienen en aluvión. Un día nos enteramos que se han de
pagar sillas de ruedas y ambulancias “no urgentes”. Otro, que se suprime el
diagnóstico de enfermedades a los recién nacidos porque también es caro. O que
–en nuevos proyectos- se estudia el pago de la nutrición en dietas especiales a
enfermos. Por ejemplo, por sonda, lo que les supondrá entre 119 y 920 euros
mensuales.
Que los recortes a la investigación suponen
en realidad dejar los presupuestos a la mitad. Que habrá menos profesores y más
alumnos por clase en los colegios. Que las tasas universitarias serán
prohibitivas. Mientras, se subvencionan y promocionan los toros. (klik egin-ver más)
Rosa María Artal, en El Periscopio