La propaganda antichavista -en buena parte de origen norteamericano y posiblemente impulsada por instituciones como la CIA, que siempre se han dedicado a estas cosas- pronostica, o mejor, preconiza, un cataclismo en Venezuela si Hugo Chávez sucumbe a su enfermedad. También insiste, sin dato alguno que lo confirme, en que esta eventualidad está a punto de producirse, e incluso en que se ha producido ya. Pero la impresión de los expertos que siguen de cerca la evolución de ese país, hasta de algunos claramente opuestos a Chávez, es mucho más moderada y todos ellos coinciden en que los inevitables cambios que habrían de producirse tras la eventual muerte del presidente bolivariano -una hipótesis que puede perfectamente no verificarse en el corto plazo- tendrían lugar de manera pausada y a lo largo de varios años. (klik egin-ver más)
Carlos Elordi, en eldiario.es
No hay comentarios:
Publicar un comentario