En Garínoain, donde la corporación municipal suele estar por ley compuesta por siete miembros, quedan únicamente tres concejales, número insuficiente según el artículo 182.3 de la Ley Orgánica del Régimen Electoral General (LOREG).
Uno de ellos, Alfonso Gil García, es de Madrid, donde reside, no tiene ningún tipo de vínculo con Garínoain y hace más de ocho meses que no ha estado en el pueblo, lo que según informa la asociación Aupa Garínoain, no es óbice para que perciba una retribución de 2.100 euros del Gobierno de Navarra. El pleno al que asistió en agosto duró 15 minutos.
En el ideario de Derecha Navarra y Española, partido responsable de esta situación, defienden una "profunda regeneración política", porque "la política es servicio y no el lugar para el enriquecimiento de los políticos". ¿Habrase visto mayor desvergüenza?
¿Hasta cuándo va a durar este esperpento a costa del pueblo de Garínoain?
No hay comentarios:
Publicar un comentario