Hace ahora exactamente siete años, apareció en la prensa un artículo titulado Escándalo monumental, que denunciaba la sigilosa y masiva inmatriculación de bienes de los pueblos por parte del Arzobispado, con un procedimiento más que sospechoso y, como se dice, a cencerros tapados. "Una inmoralidad disfrazada de legalidad" dijimos entonces, y avisamos de sus graves consecuencias futuras. (klik egin-ver más)
Jose Mari Esparza Zabalegi, miembro de la Plataforma de Defensa del Patrimonio Navarro
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