La olitense Teresa Valencia Torres falleció el 3 de junio a los 78 años de edad, después de permanecer varios días ingresada en el Hospital de Navarra. Una de las enfermedades más crueles, aquella que desdibuja la memoria, amansaba desde hace algún tiempo su recio carácter. Hasta hace solo unos meses, Tere todavía montaba en bicicleta. Pedaleando hacía recados por todo el pueblo, lo que concitaba la atención de más de un turista que la atrapaba con su cámara al ver la vitalidad de aquella abuela sobre dos ruedas. Iba de aquí para allá, con el reparto de zapatos de su hijo o los periódicos de su yerno.
Tere trabajó siempre duro y el esfuerzo nunca la atemorizó. En la precaria posguerra, de niña, se fue a servir a Donostia. De moza, fue camarera en el Túbal de Tafalla y, en tareas del campo, siempre estuvo dispuesta a echar una mano a su marido Vicente o en la fábrica de pastas de Juan Ángel. Cuidó de cuatro nietos que, a su abrigo, crecieron hermosos. Tere se ha ido rápido, pero el recuerdo que deja en quienes la quisimos es ya eterno. Goian bego ta mil esker, amona Tere.
El Olitense
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