El consejero de Educación navarro, José Luis Mendoza, ha derogado las órdenes forales que elaboraron sus antecesores con el objetivo de censurar cualquier referencia a Euskal Herria en libros de texto. La obsesión de UPN por erradicar este concepto incluyó inspecciones centro por centro para verificar que ciertos libros tenían páginas arrancadas.
Mendoza ha dejado sin efecto las cuatro órdenes forales que elaboró UPN para dejar fuera de circulación todo el material escolar que contenía referencias a Euskal Herria. La persecución de libros de texto comenzó con tres normas que fueron dictadas por el Alberto Catalán en el año 2010, cuando era consejero de Educación. Posteriormente, en 2014, su sucesor en el cargo, José Iribas, fue aún más estricto y la situación llegó a niveles de parodia amarga cuando se censuraron 22 libros de “Lengua Vasca y Literatura” por no ser específicos para Nafarroa, ya que como se usaban en todos los herrialdes contenían mapas de Euskal Herria y aparecían ikurriñas en ellos. Iribas no se contentó con retirar los libros, sino que ordenó a inspectores del Departamento hacer visitas centro por centro para verificar que no se usaban los libros proscritos o, en su caso, que las páginas hubieran sido convenientemente arrancadas. (klik egin-ver más)
Aritz Intxusta, en GARA
No hay comentarios:
Publicar un comentario