En Euskadi el verano ya ofrece la primera gran polémica preelectoral, muy previsible y que reabre una discusión jurídica sobre la pena accesoria de inhabilitación de Arnaldo Otegi como cargo público. El PP, Ciudadanos y UPyD anuncian que pedirán la inhabilitación, los fiscales discrepan y Otegi cita a Pablo Neruda cuando escribía que “podrán cortar todas las flores, pero no detendrán la primavera” . Nueva papeleta para la Junta Electoral de Gipuzkoa que acabará en el Tribunal Constitucional, con la escenografía maniquea de rigor. Buenos y malos, la moviola del desgaste en blanco y negro para un país de grises. ¡Qué más quiere la izquierda abertzale que este regreso al pasado para recobrar protagonismo! Encuentra así una baza para volver al circuito del que se ha caído por indiferencia social y por la fatiga del personal. Otegi, sea o no candidato, será el referente de EH Bildu. Es uno de los artífices del viraje estratégico que cuajó en su momento con el fin de la violencia. Una inhabilitación terminaría por proporcionar a la izquierda abertzale el relato que necesita.
El riesgo de que la sociedad vasca quiera pasar página con demasiada rapidez no se combate con amnesia, pero, desde luego, tampoco con naftalina. Claro que EH Bildu sabía que todo esto iba a ocurrir. En cierta forma, la vuelta al guión tradicional le permite, con sus contradicciones, contrarrestar el papel de candidata de Pili Zabala al frente de Elkarrekin Podemos y replicar a la minoría crítica de la línea dura, que ayer midió sus fuerzas en San Sebastián. Los fichajes de las periodistas de ETB Jasone Agirre y Maddalen Iriarte como candidatas de EH Bildu se encuadran también en esa estrategia de movilización. El objetivo de Otegi es despertar a esta sociología dormida, recuperar a los desencantados y no parecer demasiado convencionales para los más jóvenes. Que todo envejece muy rápido y las nuevas generaciones no saben muy bien quién es Neruda.
Eduardo Surio, en El Diario Vasco
para Eduardo -en su línea argumental de medias verdades porque si dice la verdad entera se autodesmonta- todo es estrategía bilduetarra prediseñada, lo de que los inhabilitadores, tribunales y legisladores tengan y contengan impunes pasado más horribles que toda la IA y ETA juntos, es simplemente una circunstancia sin importancia
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