El compositor e intérprete define Viento, lluvia como un disco “para quien quiera parar” y pone en valor el papel de lo artístico como agente de cambio que permite al oyente “sintonizar a otros niveles con la naturaleza y con uno mismo”.
El trabajo, grabado en una sola toma en diciembre de 2021, recoge once temas que el autor clasifica en viento o lluvia. Esos dos elementos le han supuesto “una excusa, en el mejor sentido de la palabra” para tirar de un hilo musical común, además de para dejar espacio para fuego y tierra en un futuro.
No hay agendadas próximas fechas de presentación del disco, aunque ya puede adquirirse en formato físico en la librería La Feria de Tafalla o en la web del artista, que avisa de que sus canciones son como el entorno que las inspira: siempre están en movimiento y no las interpreta igual, sino que deja espacio para la improvisación cada vez que toca las teclas.
La Voz de la Merindad
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