Para combatir este mal, se formó en Sangüesa la Hermandad con todos los pueblos de la Val de Aybar y de las Cinco Villas de Aragón. Su labor fue muy efectiva porque continuamente encontramos ahorcados en Sangüesa donde estaba el Merino que administraba la justicia. Así como el homicidio se castigaba con una multa y no muy grande, el robo era la muerte segura. Teniendo presente que las guerras entre los navarros y aragoneses eran muy frecuentes, estos años debieron de disfrutar de paz o los bandidos se habían hecho dueños de los caminos.
lunes, 3 de mayo de 2010
HERMANDAD BANDIDOS 1469
Para combatir este mal, se formó en Sangüesa la Hermandad con todos los pueblos de la Val de Aybar y de las Cinco Villas de Aragón. Su labor fue muy efectiva porque continuamente encontramos ahorcados en Sangüesa donde estaba el Merino que administraba la justicia. Así como el homicidio se castigaba con una multa y no muy grande, el robo era la muerte segura. Teniendo presente que las guerras entre los navarros y aragoneses eran muy frecuentes, estos años debieron de disfrutar de paz o los bandidos se habían hecho dueños de los caminos.
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