
Todos los sondeos apuntan a una mayoría cómoda del centroderecha frente al desplome de la coalición de izquierda que ha gobernado Islandia en los últimos cuatro años, y la única duda parece ser si gobernará el conservador Partido de la Independencia o el centrista Partido del Progreso, virtualmente empatados. Centristas y conservadores gobernaron juntos entre 1995 y 2007, un período donde comenzó la ola privatizadora, empezando por los principales bancos de la isla, que en una ola expansiva insólita llegaron a tener un tamaño equivalente a diez veces el PIB de Islandia, y cuya quiebra situó al país en una crisis sin precedentes. (klik egin-ver más)
Público