En el juicio celebrado ayer contra la vecina y abogada detenida en la fiesta del Gardatxo Eguna, la fiscalía pide seis meses de cárcel e inhabilitación especial para el derecho de sufragio pasivo mientras dure la condena. A la vecina le acusan de “delito de resistencia y desobediencia grave a los agentes en estado de embriaguez”. Según el escrito de la fiscalía, la acusada se acercó a un grupo de guardias mientras redactaban un acta de infracción a unos jóvenes diciendo que era la abogada de los mismos. Y al requerirle su identificación, las mismas fuentes indican que se negó indicando que solo les enseñaría el carné del Colegio de Abogados, para luego acusarlos de “torturadores” y lanzarles insultos escupitajos y varios empujones. Sin embargo, los testigos que acudieron al juicio y el movimiento juvenil Gardatxo sostienen que la versión de la Benemérita es un ”burdo montaje, que muchos pudimos presenciar. No hubo ni insultos, ni puñetazos ni escupitajos y mucho menos negativa a identificarse tal y como dice la Guardia Civil”. Asimismo han mostrado su solidaridad con la vecina “sea cual sea el resultado del juicio”.
La Voz de la Merindad
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