miércoles, 20 de mayo de 2020

EL ECO DE LOS APLAUSOS. O CÓMO SE TRAJO EL AMBULATORIO A TAFALLA

Se ha convertido ya en costumbre. Todos los días a las 20.00 h., salimos a las ventanas a aplaudir a los servicios sanitarios que están realizando una labor encomiable en esta crisis sanitaria. En nuestro caso, vítores a los y las profesionales del Centro de Salud de Tafalla. Sin duda, está es una buena ocasión para recordar cómo la ciudad del Zidakos logró su ambulatorio. Da buena cuenta de ello el libro Historia de Tafalla de Jose Mari Esparza.

Debemos remontarnos a los años en los que Franco dictaba los designios de Navarra desde Madrid. Tiempos en los que se desayunaba, comía y cenaba nacional-catolicismo. Allá por 1950, el 24 de febrero, regresaba de Madrid el alcalde Casimiro Armendáriz Sada, empresario, que había ido a solicitar la apertura de un ambulatorio en la ciudad, debido a las necesidades médicas existentes. Topó con la negativa estatal, excusada en la falta de liquidez. Había sustituido en el cargo, el 1 de septiembre del año anterior, a Alicio Zufiaurre Irujo, alcalde predecesor. Consistorio de índole carlista en una ciudad eminentemente agraria. Habría que esperar 30 años más, hasta que las y los tafalleses tomaran partido y lo trajesen ellos mismos.   (klik egin-ver más)
Iñigo Urzain, en La Voz de la Merindad

No hay comentarios:

Publicar un comentario