
La amistad de Myriam, diseñadora, con Nunila López, la guionista, les llevó a crear esta tierna historia de La Cenicienta, una desmitificación del popular cuento de hadas con un mensaje esperanzador: 'tú tienes permiso para hacer la vida que quieres, nadie tiene que concedértelo, ni siquiera un príncipe'. Enviaron el libro a todas las editoriales y como ninguna se interesó decidieron autopublicarlo ellas y ofrecerlo a través de Internet. Dio la vuelta al mundo y después de este boom, una gran editorial les propuso editarlo.
La Cenicienta que no quería comer perdices
No hay comentarios:
Publicar un comentario