La radical contradicción entre los comunicados que en las últimas horas han emitido los militantes locales y la Comisión Política de NaBai 2011 en torno a la presentación o no de candidatura de la coalición a las elecciones municipales de Tafalla, ha generado una situación de confusión nada deseable en las fechas en que nos encontramos. En esa necesaria y compleja dialéctica entre la perspectiva particular y la general se habrán cometido probablemente errores por diversas partes, pero nadie podrá negar que además de hacer lo indecible por estar presentes en las elecciones, los militantes de Tafalla han buscado la coordinación de sus gestiones con las que se estuviesen haciendo desde la capital, han informado puntualmente de sus muchas reuniones a las direcciones de sus partidos respectivos, y han sido éstas las que en cada ocasión han decidido sobre la oportunidad de su presencia en las mismas.Que NaBai no presentase candidatura municipal era, desde luego, objetivo estratégico de algunos. Que en la presión ejercida sobre los posibles candidatos nabaizales se han empleado formas en ocasiones poco sutiles, también es cierto. Hablar de "coacciones", como se expresa en el comunicado de la Comisión Política, ya resulta exagerado. Pero atribuir "exclusivamente" las dificultades políticas para sacar adelante una lista con arraigo y posibilidades a esa presión supone ya una notoria distorsión de la realidad.
La Comisión Política de NaBai 2011 es muy libre de intentar apurar las posibilidades de sacar una candidatura en Tafalla. Entretanto la opinión de los militantes locales es la que dieron a conocer el jueves en una muestra de humildad y realismo político tras haberse dejado la piel por estar en las elecciones. Lo que a su juicio es, como corroboró ayer a los medios Iñaki Navarlaz, además de una posición posibilista en búsqueda del cambio político en la ciudad, una inversión en favor de la credibilidad política de Nafarroa Bai.
Praxku
