Para ilustrar al lector poco curtido en las historias protagonizadas por el Caudillo, o sea, por el más sanguinario dictador europeo después de Hitler, conviene explicar que el Pazo de Meirás es una finca con palacio ubicada en la localidad coruñesa de Sada. Tras diversos avatares históricos y variados propietarios, la finca perteneció a la escritora Emilia Pardo Bazán y a sus descendientes tras su fallecimiento en 1921. En 1938 las autoridades franquistas coruñesas desalojan a la familia propietaria y deciden ofrecer el palacio al golpista Francisco Franco como residencia de verano. Se constituyó una comisión con el fin de acondicionar el pazo y recaudar el dinero necesario para ello por medio de donativos forzosos. A funcionarios y trabajadores de empresas privadas se les restó parte de su salario, y se obligó a los ayuntamientos de la provincia a aportar como mínimo el 5% de la recaudación del impuesto de la contribución “para que nadie pueda mañana considerarse postergado si su deseo es contribuir con su grano de arena para el Pazo del Caudillo”. (klik egin-ver más)
Pablo Muñoz, en Grupo Noticias