La convivencia y la paz requieren que los derechos humanos sean un absoluto ético, y ahí es donde yo creo que al MLNV le queda un largo camino por recorrer. Y de cara al futuro, necesitan incluir esa perspectiva ética en la acción política, adoptar un compromiso de que nunca jamás se volverá a poner la causa política por delante de la dignidad humana. (klik egin-ver más)Noticias de Gipuzkoa