La chulería de Alemania no tiene límites. Alemania, un país que ha hundido dos veces a Europa en la miseria, y que está intentándolo ahora por tercera vez, pretende que Rusia, el país en el que hace apenas 70 años los alemanes asesinaron a nada menos que a 26 millones de personas, les devuelva no sé qué tesoros que supuestamente las tropas soviéticas robaron a Alemania tras liberar Europa del nazismo.
Todavía hoy es frecuente que en alguna subasta de arte aparezca alguien reclamando la propiedad de una obra que era de su familia, habitualmente judía, hasta que los nazis -o sea, el gobierno alemán- se la robó, previo el asesinato de sus parientes. (klik egin-ver más)
Ricardo Royo-Vilanova, en "A sueldo de Moscú"