Ha muerto Sabin Arana Bilbao, histórico preso antifranquista que estuvo en el umbral de la muerte tras las torturas que sufrió en comisaría tras su caída como militante de ETA en 1968. Tras nueve años de prisión, continuó su compromiso político en LKI (Liga Komunista Iraultzailea), organización trotskista en la que ingresó en la cárcel, compartiendo militancia con el grueso de los que habían integrado ETA VI Asamblea. Su actividad política y social la ha mantenido siempre, desde la adolescencia hasta el final. En 1962 ya le fue impuesta una sanción de 25.000 ptas. por tocar el txistu en fiestas. Y recientemente fue uno de los impulsores de Goldatu, colectivo de represaliados por la dictadura. El año pasado viajó a Argentina para prestar declaración en la querella abierta en aquel país contra el franquismo. Fue un claro exponente de aquella generación juvenil, "Euskadiko Gaztedi Berria" que superando los traumas y los miedos de la postguerra, declaró la guerra sin cuartel a la dictadura. Y ese espíritu lo ha conservado hasta el final. AGUR ETA OHORE!
Mañana, miércoles, será incinerado a las cuatro de la tarde en el tanatorio de Lauzurika de Gasteiz, en las inmediaciones del hospital de Txagorritxu.