El Gobierno de Navarra ha cumplido escrupulosamente la ley y las decisiones judiciales sobre Rozalejos. La Policía Foral desalojó (sin detenciones) cuando el juez lo dictó. Mientras, se ha tratado de tener un margen de negociación con la petición sobre la que ayer se resolvía judicialmente. Una petición que no supone desistir en la recuperación de un bien que es de todos, y para el que hay un proyecto. Una petición que en absoluto supone avalar la ocupación como sistema. Sin embargo, permite al Gobierno un tiempo que le ayuda a garantizar la seguridad de las personas.
Orain, Gobernuak desalojatzeko agindua bertan behera uztea lortu du. Mehatxu eta xantaiarik gabe. Okupei berdina eskatu behar zaie: teilatutik ez negoziatzea eta okupazioa behin betikotzat ez hartzea. Guztiok bete behar dugulako legea, denon arteko elkarrizketa bultzatuz.
Hemos vivido momentos de tensión y una falta absoluta de vocación de diálogo por otras partes. Y se ha demostrado en el cumplimento de las normas. Todos debemos cumplir la ley. El Gobierno lo ha hecho; y no puede existir un diálogo sin reciprocidad en una cuestión así.
Alternatibak badaudelako; ondare publiko baten erabilera pribatua ez da, nire ustez, horietako bat. Ezta okupei mesede-tratua ematea ere.
Hay alternativas, las hay; y no pasan por un uso privativo de un bien público. Ni por dar a quien lo ha ocupado un trato de favor.
Corresponde ahora al Ayuntamiento de Pamplona sumarse también al diálogo y a la búsqueda de soluciones, para ofrecer espacios que alojen proyectos autogestionados del Gaztetxe Maravillas; una labor que, competencialmente, corresponde al consistorio. Elkarrizketara eta konponbideen bilaketara batzea espero dugu.
Diálogo, sí: pero respetando las normas que la ciudadanía nos hemos dado y cumpliendo con ellas.
Koldo Martínez