Con este acto, la Escuela pretende difundir su firme reivindicación por la paz, así como mostrar su solidaridad con las víctimas y los refugiados de la guerra. Lo expresan en estos términos:
"Nosotros no somos expertos en política ni en cuestiones geoestratégicas; somos músicos, pero sabemos y queremos reivindicar con toda nuestra convicción que la paz es un derecho irrenunciable, que la paz es un derecho universal, que la paz es la manera de entenderse, a pesar de las desavenencias, y que la paz es el único camino hacia el futuro. Que la música acalle las bombas y nuestros instrumentos sean las únicas armas, disparando notas para amansar el mundo con una melodía de paz".