Nada resulta nuevo. La situación y algunos de los riesgos que en el panorama político estatal hoy divisamos ya los hemos encarado. En 2004 tuvimos que afrontar un precipicio de política de confrontación muy similar encabezada por el entonces presidente del PP, José María Aznar. Nafarroa Bai fue entonces la herramienta eficaz para hacerle frente, encarnando la defensa de una Navarra que hasta esa fecha había estado deliberadamente silenciada.
Desde entonces han pasado 15 años. Los últimos cuatro, sin duda, han sido decisivos para Navarra. Por primera vez un Gobierno de progreso sustentado por cuatro formaciones políticas propiciaba un cambio institucional de calado. Quiero subrayar esta circunstancia porque la composición del mapa político de Navarra, que desde el nacimiento de Nafarroa Bai en 2004 se vio claramente reforzado en una mayoría de cambio, ha tenido en el empeño de la ciudadanía ante las urnas a su principal valedor.
Uxue Barkos Berruezo, en Diario de Noticias