Después de conocer que la alta velocidad no llega a Zaragoza ni a Gipuzkoa y que el trazado de alta velocidad es sólamente entre Castejón y Pamplona/Iruña, el bombazo informativo oficial no es sólo que no se haga todo el trayecto, sino que el poder sacar las exportaciones navarras en ancho internacional y así estar unidos a la red europea, se podía haber llevado a cabo hace unos cuantos años.
Después del anuncio del tercer raíl y lo sencillo de su implantación, me vino a la cabeza cómo hace años levantaron toda la vía en el trazado de Pueyo/Puiu, frente a la casa de mis padres, y estando allí tras leer la noticia sobre el tercer raíl y mirar un poco en Internet, el mosqueo se apoderó de mí y me acerqué a las vías, que están a no más de 150 metros, y ¡oh, sorpresa!: la obra hecha hace unos años consistió en cambiar las antiguas traviesas, que ya eran de hormigón, sólo válidas para el ancho ibérico, por las ahora instaladas, traviesas polivalentes, válidas para el tercer raíl, algo tan sencillo que ADIF ya lo tenía planificado. Y siendo esto así, el tramo Castejón-Altsasu posiblemente está adaptado en su totalidad al tercer raíl, para el que sólo falta plasmarlo encima de las traviesas y así dar salida por Vitoria/Gasteiz a los productos navarros a Europa. ¿Para qué seguir, entonces, con unas obras de 70 kilómetros que carecen de todo sentido, cuando de golpe y porrazo oficial reconocen que el tercer raíl es rápido y económico y nos conecta con Europa en todos los sentidos? Además, ya están instaladas desde hace años las traviesas polivalentes en las que el tercer raíl iría anclado.
Si la duda y el debate podría estar en que el nuevo trazado del TAP-TAV era la única posibilidad de sacar óptimamente nuestros productos fuera, el bombazo informativo del tercer raíl ha desmontado todo el chiringuito, que lo tenían muy callado. Por lo tanto, no es necesario que se adjudique ni se realice un sólo kilómetro más del tramo de alta velocidad navarro, y con todas las cartas ya boca arriba, actuemos con cordura y sensatez definitiva.
Iñaki Navarlaz
