El expresidente de Banesto confirma su candidatura a las
elecciones gallegas. Se cumple así otro de los peores temores del popular
Alberto Núñez Feijóo, que tendrá que luchar por los votos en Pontevedra, la
misma provincia que Conde.
El anuncio realizado este sábado supone un paso más en el
río revuelto en que se ha convertido el mapa electoral gallego, con la
izquierda y el nacionalismo fracturados y ahora con la irrupción de Conde, que
podría quitarle al PP los beneficios que en principio debería otorgarle la Ley
d'Hont al partido tradicionalmente más votado en Galicia.
El actual presidente de la Xunta llegó a expresar sus
temores sobre Conde al afirmar en una entrevista en Punto Radio que votarle "significa avales para que gobierne un
cuatripartito en Galicia", en referencia a la opción de una unión de
toda la izquierda ante una eventual pérdida de la mayoría por parte del Partido
Popular. Feijoo sabe, en definitiva, que Mario Conde es un problema para sus aspiraciones de repetir mandato.
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