Tras años de incumplimientos reiterados del convenio de panaderías de Navarra, de aplicación en la planta y con el salario congelado desde hace siete años, la empresa va un paso más allá y propone una modificación sustancial de las condiciones de trabajo, con unos cambios organizativos que les llevarían a trabajar fines de semana en jornadas de 10 horas diarias.
Ante esta propuesta, los trabajadores del departamento de mantenimiento han decidido dar un paso al frente en defensa de sus derechos y comenzar un CALENDARIO DE MOVILIZACIONES.
Como primera medida, ya se han colocado pancartas en diversos puntos de la zona denunciando su situación ante la opinión pública.
La semana próxima se hará una concentración delante de la puerta de Berlys-Tafalla, y dependiendo de la respuesta de la empresa, se irá incrementando el nivel de las movilizaciones.
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