Conocida públicamente la declaración final de ETA conocida este jueves, el Gobierno de Navarra ha dado a conocer tres primeras consideraciones:
En primer lugar, el comunicado de ETA declara la disolución de la banda terrorista: una disolución unilateral y definitiva, que no es sino el anuncio de lo que nuestra sociedad reclamaba y exigía desde hace mucho tiempo. Estamos por tanto ante el cierre de un oscuro capítulo de nuestra historia marcado por el terrorismo, la violencia y el dolor.
En segundo lugar, ETA ha perdido la oportunidad de cerrar su actividad terrorista con una posición en la que reconociera de forma clara y rotunda la injusticia del dolor provocado. ETA ha perdido la ocasión de proyectar una mirada crítica hacia su actuación en estas décadas y dar con ello una respuesta a todas las víctimas sin distinciones, ya que todas ellas son víctimas de una violencia injusta. De hecho, las víctimas son las grandes ausentes en este comunicado.
Y en tercer lugar, ETA ha perdido la oportunidad que representaba este último comunicado de hacer una autocrítica real y profunda. El comunicado final de ETA sigue tratando de justificar su existencia y su acción, cuando ETA nunca debió existir y nunca nadie debió creer que una idea o proyecto podía defenderse acudiendo a la violencia. La violencia terrorista de ETA ha sido injusta e injustificable, y responder a sus consecuencias requerirá de un trabajo serio y profundo que el Gobierno de Navarra está dispuesto a acometer desde el compromiso con el derecho de las víctimas en este nuevo escenario.
El Gobierno de Uxue en poco o nada se ha diferenciado de lo que hubieran dicho y declarado institucionalmente los gobiernos navarros anteriores respecto del final de ETA. No hay “cambio” por ningún lado y el discurso sigue siendo cínico e hipócrita y fiel al axioma ese de la paja y la viga. Mientras el ejecutivo navarro reprocha a ETA falta de autocrítica y de perder una oportunidad para reconocer sus errores, errores que los ha pagado y pagándolos está en la cárcel (cosa que parece todo el mundo olvidar), el gobierno de Uxue hace lo propio: olvidan que el Gobierno de Navarra es Estado y como tal cómplice y mucho más del terror del Estado que, todavía, sigue impune y sus víctimas exactamente igual que las republicanas: en cunetas… Olvida Uxue que los gobiernos de Navarra habidos fueron cómplices y arietes del terror de la lucha antiterrorista; olvida que miles de ciudadanos fueron vilmente violentados bajo esos gobiernos, junto con el Central, y maltratados de mil formas por el Poder Coercitivo del Estado: esos mismos que perpetraron el terror del Estado ahí donde había ETA, vascos y política y ahí, que no se nos olvide, donde no había nada de esto.. Y hoy, 7 años después de que ETA ya no atentara de ninguna forma, las víctimas del terror e impunidad del Estado siguen sumando sin que nadie se sienta responsable de nada. Por todo ello el gobierno de Uxue ha perdido una oportunidad única –tal vez ya no volvamos a tener otro gobierno de “cambio”- para reconocer la violencia, la injusticia y la impunidad que desde los gobiernos autónomos y Central se ejerció contra parte de la ciudadanía, sometida a leyes injustas y corruptas, ilegalizada, apaleada, violada, torturada e incluso asesinada, cosa que, siguiendo las espurias palabras que tanto gusta mentar contra ETA al ejecutivo navarro : “jamás debió ocurrir ni nada justifica haya ocurrido”
ResponderEliminarSin embargo el gobierno Barkos ha remedado a los diferentes jefes de la GC, de la policía nacional, de la delegación del gobierno, del ejército, que cuando toman posesión de sus puestos en Navarra se dedican a darnos una visión idílica de la GC, la policía, el ejército, etc etc como si estos no hubieran sido los mismos que ejercieron el terror del Estado tras la muerte del dictador y como si esos estamentos no hubieran sido el terrorismo nazional católico que desde 1936 no ha dejado de actuar y causar las víctimas que el Estado –determinado como “democrático” - (y el gobierno de Navarra gobierne quien lo gobierne es Estado) encima se permite volver a tirar en otras cunetas como tiraron a las de la República. Olvida el gobierno de Uxue que “homenajear” a las víctimas del terror del Estado no es lo mismo que RESARCIR, y que el Estado, que también es el Gobierno de Navarra, sigue humillando a las víctimas de su terror y encubriendo a los verdugos de ellas. Por todo ello el gobierno de Barkos debió central su discurso, para así ser de reconocimiento, de verdad, de reconciliación, en la violencia que el Estado ha practicado y que no tenía razón ni excusa para ejercerla y que, encima, sigue impune, algo que no se puede decir sobre la violencia de ETA por mucho que griten las insolidarias asociaciones de víctimas de ETA que jamás tuvieron un ápice de misericordia con todas las víctimas –muchas más- que ETA no violento, pero ese Estado que las subvenciona sin que les importe lo más mínimo.
Para luchar contra ETA no hizo falta ninguna fuerza armada. Como dice la propia declaración de Ajuria Enea firmada por el PP y el PSOE: “en ausencia de violencia se puede hablar de todo”.. Y hoy como ayer son el PSOE y el PP los que incumplen lo firmado mediante la violencia de su poder armado-policial-militar-judicial-económico incontestable para todos aquellos que si quieren “hablar de todo”. Por ello siempre se han equivocado –y el gobierno Uxue está equivocado- aquellos que han centrado todos los esfuerzos en acabar con ETA mientras ningún esfuerzo han destinado al origen de la violencia: las imposiciones totalitarias y antidemocráticas de un Estado nacido tras una gran matanza todavía impune..