lunes, 14 de diciembre de 2015

AMENAZAS PARA NUESTRA FORALIDAD (y 8)


CON LA RADIAL POR EL MONTE

Algún energúmeno anda suelto estos días por los montes serrando con una radial los mojones que recuerdan a los castillos que defendieron el reino de Navarra en 1512. Ya han hecho la tropelía en Bermeo, Huarte, Unzué, Aibar, Sangüesa, Monjardín e Igúzquiza, que se sepa, porque da la impresión de ser una campaña perfectamente planificada y cualquier día caerá el siguiente. No se puede negar que los aserradores se toman su trabajo y su tiempo porque no parece fácil cortar una placa de acero corten de más de sesenta kilos anclada al suelo con hormigón, y llevársela. Hace falta una cierta infraestructura y más teniendo en cuenta que los mojones no están situados a pie de calle sino en pleno monte, en los lugares donde se levantaban los castillos. Cerca de cuarenta monolitos de este tipo se colocaron en 2012, coincidiendo con el 500º aniversario de la conquista de Navarra, por iniciativa de Nafarroa Bizirik. En ellos, junto al escudo de las cadenas figura una leyenda que hace referencia a la historia de cada fortaleza. En el caso de Aibar, aprovecharon el viaje para atacar también el monumento en homenaje a los aibareses asesinados en 1936 por sus ideas republicanas, de donde se llevaron también la bandera tricolor.
No es la primera vez que se atenta contra elementos que recuerden de alguna manera la Memoria Histórica, esa que la derecha quiere olvidar y que la olvidemos los demás, pero que algunos nos la recuerdan cada día con acciones sin sentido como estas. Suscribo de principio a fin las palabras que escribió el otro día el alcalde de Aibar, Pedro Lanas: “Se trata de una agresión violenta, planificada y ejecutada por mentes enfermas, personas intolerantes que no respetan ni la cultura, ni la historia, ni a los vecinos de Aibar, ni las decisiones democráticamente adoptadas por el Ayuntamiento, empleando para ello la violencia, la alevosía y la nocturnidad”. Nada que añadir.

Pablo Gorría, en Diario de Noticias

RELIGIOSA RESIDENTE EN SIRIA ELOGIA LA INTERVENCIÓN RUSA Y CRITICA LA DE OCCIDENTE

La misionera María Guadalupe, de la congregación del Verbo Encarnado, quien se encuentra de visita en España, ofreció esta semana una conferencia donde relató sus vivencias en la ciudad siria de Alepo y dio su opinión sobre el conflicto, publica el portal 'Infovaticana'. Durante su intervención, la religiosa trasmitió el anhelo de los sirios de que la guerra llegue a su fin. "Ellos no desean huir, tan solo quieren vivir en paz en su tierra", donde según ella, "no hay un solo día de silencio por los ruidos de explosiones y cañones" que se han convertido en un rutina para todos sus habitantes.
Por otro lado, María Guadalupe mostró su oposición a las intervenciones de Occidente, a las que considera "inútiles" y pidió a sus gobiernos que dejen de financiar y entregar armas a los grupos terroristas. Igualmente, destacó la intervención de Rusia, que es vista por las víctimas de esta guerra como "un alivio". La misionera considera que Rusia ha sido el único país que ha reforzado las labores del Ejército sirio, liderado por Bashar al Assad, y ha permitido recuperar territorios estratégicos facilitando la entrada de alimentos y ayuda humanitaria.
Infovaticana

LO QUE HAY EN JUEGO

La legislatura que comienza tras las próximas elecciones es decisiva en relación con el futuro de nuestro autogobierno. Se van a configurar nuevas mayorías políticas en Madrid, toca renegociar el Convenio, se abrirá la reforma constitucional y nadie nos asegura que vaya a ser a mejor.
En estas elecciones están en juego dos cosas: la más inmediata, nuestro Convenio y el modelo de autogobierno; la segunda, en el medio plazo, la disputa por la hegemonía política en Navarra, que, una vez que UPN ha dejado de ser identificada como la fuerza política que mejor defiende a Navarra, abre un espacio de juego político con enormes posibilidades para Geroa Bai. (klik egin-ver más)
Daniel Innerarity, en Diario de Noticias

EL POZO DE LOS NICOLES

"El Pozo de los Nicoles es un aljibe de recogida del agua de lluvia, construido a principios del siglo XX por Emilio Nicol, o por su padre, León Nicol. Hoy día está casi ciego y relleno de tierra arrastrada por la lluvia, pero a principios de los años 60 medía 4 ó 5 metros de profundidad, y mantenía agua todo el año. Permanece tapado por losas de piedra, que mantenían el agua del interior a la sombra y la protegían de la evaporación" (klik egin-ver más)
Tafalla a Pie