martes, 21 de marzo de 2017

LA ZONA NO VASCÓFONA OCUPARÁ MENOS DE LA MITAD DEL TERRITORIO NAVARRO

La previsible incorporación de 33.194 habitantes a la "Zona Mixta" establecida por la Ley del Vascuence supone un considerable empuje demográfico para la satisfacción parcial de los derechos lingüísticos de la ciudadanía navarra. Pero al margen de este dato, que es indudablemente el que tiene relevancia social, no se puede pasar por alto que los 953'83 kilómetros cuadrados que aportan los 28 ayuntamientos que por el momento han hecho la solicitud suponen también un avance territorial de indudable carga psicológica. La llamada "Zona No Vascófona" continuará siendo la más extensa de las tres áreas, pero pasará de ocupar el 56'74% del conjunto de la superficie de los municipios navarros a constituir el 47'04%. La Zona Mixta, en la que vive prácticamente el 60% de la población, supondrá ya el 28'71% del territorio.

Con todo, los resultados de esta modificación estructural estarán lejos de alcanzar siquiera los límites del mapa que dibujó Louis Lucien Bonaparte en 1863. El valle de Urraul, que vio morir a los últimos euskaldunes después de la guerra civil, continuará en la "zona no vascófona", como si el euskera le fuese algo ajeno. En Navascués, Lumbier, Ibargoiti, Unciti, Valdizarbe....... en el valle de Lana o en la propia Valdorba, donde no se dejó de hablar hasta el siglo XIX, el euskera sigue siendo un elemento importante del patrimonio afectivo, por encima de todos los factores de regresión que acabaron con su uso. Sería de desear que más ayuntamientos de esas zonas se sumen en el período de tramitación a este movimiento de recuperación que no discrimina a nadie y no causa otros perjudicados que aquellos que históricamente han equiparado al euskera con lo estrictamente rural, el atraso, la humillación y la marginación.

Praxku

UNA CONVERSACIÓN CON FERMÍN MUGURUZA EN LA PLAZA ROJA DE IRÚN

Para muchos de los miembros de mi generación resulta casi imposible recordar nuestra juventud sin que esté tu música sonando. Ese papel dentro de la escena musical vasca, ¿lo esperabas cuando empezasteis?

No. Cuando empiezas no puedes imaginar que cincuenta y tres años después iba a estar aquí hablando contigo. De hecho, en el momento en que empiezo, la filosofía que más me influye es el existencialismo francés. Recuerdo entrevistas de aquella época en las que me preguntaban cuánto pensaba vivir. Y no tenía pensado vivir más allá de los treinta años. Así de claro. Anhelaba una vida breve, era contrario a tener hijos… Los animales en cautividad no se reproducen, me decía. En fin. Sartre y Simone de Beauvoir eran mis dos grandes influencias. Sentía la náusea existencial.
Así que no, nunca imaginé que pudiéramos publicar ni siquiera el primer disco de Kortatu. Era imposible imaginar que tantos años después terminaríamos recorriendo el mundo entero mostrando nuestra música. (klik egin-ver más)
Eduardo Madina, en jotdown.es

GEROA BAI AFIRMA QUE EL AUTOBÚS DE "HAZTE OÍR" VULNERA EL RESPETO DEL COLECTIVO TRANSEXUAL

Geroa Bai vuelve a mostrar su firme rechazo al autobús transfóbico de ‘Hazte oír’ que llega hoy a Pamplona y reitera su apoyo y reconocimiento de los derechos de las personas transexuales. “La presencia de dicha campaña en Iruñea es un ataque a la diversidad sexual y de género y vulnera el respeto del colectivo transexual”, valora Virginia Aleman, parlamentaria portavoz de Relaciones Ciudadanas e Institucionales.
Aleman considera que dicho autobús, al que le acompañan discursos y mensajes transfóbicos, no tiene cabida en una ciudad diversa y plural como es Iruñea, y espera que las instituciones pongan en marcha las medidas oportunas para que este autobús circule el menor tiempo posible por la ciudad.
“Siempre hemos hecho una férrea defensa de los derechos humanos para todas las personas, en este caso de los derechos de las personas transexuales y de todo el colectivo LGTBI”, recuerda Aleman, que añade que es “lamentable” que todavía existan campañas como la de ‘Hazte Oír’ que atentan contra la tolerancia, el respeto y la convivencia.