sábado, 3 de octubre de 2020

GEROA BAI DA INICIO AL NUEVO CURSO POLÍTICO

LA CARTA BILINGÜE (DE MATXIN DE ZALBA A MARTÍN DE SAN MARTÍN)


 Corría el año 1969 y  el responsable del archivo general de navarra Florencio Idoate   hizo un gran descubrimiento . Entre los miles de documentos medievales de la Cámara de Comptos que estaba organizando, encontró una breve carta escrita en romance navarro y en euskera. ( aunque se encuentran en el mismo documento son 2 cartas  una se la envía Martín de San Martín a Matxin de Zalba y éste le contesta  ) dicha carta y su estudio fue publicada en la revista “ Fontes Linguae vasconum “  por Florencio Idoate ese mismo año.

Este párrafo en euskera constituye aún hoy día el texto más extenso  que poseemos en esta lengua antes de la Edad Moderna.

 Hay que considerar que    toda  la documentación escrita de la administración del Reino de Navarra  en el medievo  está en  romance   o latín.  El Romance navarro es la variedad del idioma navarro-aragonés, hoy extinta.Hablada durante los siglos X al XVII en el sur de Navarra. D. José María Lacarra apuntaba  ¿Cómo reconstruir el pasado de un Reyno que está escrito  en una lengua que solamente era hablada por una minoría ?

Según Florecio Idoate la carta se encontraba cosida en un libro con las cuentas elaboradas por el tesorero del Reyno de Navarra correspondientes al año 1415 , aunque esta carta corresponde a 1416.Desde el primer momento él se dio perfecta cuenta de la importancia de su hallazgo, había dado con el texto más extenso en euskera anterior al siglo XVI de carácter no religioso , no obstante su olfato investigador le decía que su verdadera importancia residía en el contexto histórico y en sus autores. (klik egin-ver más)

Juan José Úcar Muruzábal

LEOZ: ASÍ ES LA VIDA EN LO ALTO DE LA VALDORBA

                         En las últimas horas del día, con el sol bajo, o ya sin él, Javier Arizcuren encuentra sosiego en las luces de sus vecinos, las que se encienden en casa ajena y se ven a través de la ventana. "Cuando después del confinamiento me iba a andar a última hora, ya de noche, y veía que no había casi nadie en el pueblo me daba cosica", resume, porque "ver luz donde los vecinos te hace sentir acompañado, saber que está ahí esa persona...".

                     "Somos pocos pero nos hacemos compañía", apunta Arizcuren. En Leoz, un pueblo en el que viven 20 personas, los días "son tranquilos", se suceden entre las visitas del panadero, las del pescadero, los corrillos en la calle y los paseos de algunos turistas. "Suele venir gente y preguntan por la iglesia", relata Mari Cruz Zaratiegui, la vecina que vive en la casa contigua a la parroquia local. "Nos turnamos las llaves de la iglesia entre nosotros porque la tenemos cerrada y cuando viene gente que quiere verla somos nosotros quienes nos encargamos de abrirla", comenta Zaratiegui. Como en el resto de lugares de la Valdorba, la influencia del románico también se nota en Leoz. La iglesia, del siglo XII, se erige en el centro del pueblo, en la plaza, aunque ahora guarda restos de estilo barroco, e incluso alguna influencia gótica, pues se transformó a lo largo de los siglos XVI y XVII.    (klik egin-ver más)

Edurne Pujol, en Diario de Noticias