lunes, 21 de diciembre de 2015

HACIA UN ESCENARIO DE INGOBERNABILIDAD

Con una participación del 73,20 % (frente al 68,94 % de 2011), los resultados de las elecciones de este 20D han confirmado en gran parte las principales tendencias que anunciaban los sondeos. Por resaltar las más relevantes, la suma de los dos viejos partidos es de 50,7 % (213 escaños), con un PP que pasa de un 44,63 % y 186 escaños a un 28,72 % de votos y 123 escaños, y un PSOE (22 % y 90 escaños) que evita por poco el “sorpasso” de Podemos, pero que en lugares emblemáticos como Madrid pasa a ser cuarta fuerza; esta formación más las confluencias (En Comú Podem en Catalunya, En Marea en Galicia y Compromís-Podem en la Comunidad Valenciana) llegan a un 20,7 % y 69 escaños; IU, con un 3,67 % y 2 escaños, salva su presencia en el nuevo parlamento pero no podrá formar grupo parlamentario propio; en Catalunya ERC, con 2,39 % y 9 escaños, supera a la formación de Artur Mas, que se queda con 2,25 % y 8 escaños, y en Euskal Herria Bildu conoce un notable retroceso pasando de 7 escaños a 2; Ciudadanos, en cambio, ha ido perdiendo fuelle llegando finalmente a un 13,93 % y 40 escaños.  (klik egin-ver más)
Jaime Pastor, en Viento Sur

EL ESCAÑO DE PODEMOS EN HUESCA LLEVA AL SUPREMO A "LOS OCHO DE YESA"

 El escaño obtenido el domingo por Podemos en Huesca llevará al Tribunal Supremo el caso de Los ocho de Yesa, un grupo de activistas de movimientos sociales, sindicatos y organizaciones ambientales para quienes la Fiscalía pide penas de entre treinta meses y seis años y medio de prisión por los incidentes que se registraron el 10 de octubre de 2012 en Artieda (Zaragoza), en una protesta contra las expropiaciones para el recrecimiento del embalse de Yesa, en el río Aragón. 
Uno de los acusados es Jorge Luis Bail, diputado electo después de que el domingo 21.768 oscenses (17,9%) eligieran la papeleta de Podemos-Ahora Alto Aragón en Común para romper el bipartidismo en esa provincia por primera vez desde 1977 en unas elecciones generales.
La causa fue instruida por uno de los juzgados de Ejea de los Caballeros e iba a ser enjuiciada por la Audiencia Provincial de. Sin embargo, la elección de Bail, miembro de Ahora en Común, obligará a trasladar la causa al Supremo por estar aforado.  (klik egin-ver más)
Eduardo Bayona, en Público

EL PAI CONTINUARÁ EN LOS CENTROS EN LOS QUE YA ESTÁ IMPLANTADO

El consejero de Educación del Gobierno de Navarra, José Luis Mendoza, ha confirmado al Consejo Escolar de Navarra la decisión del Ejecutivo foral de dar continuidad al Programa de Aprendizaje en Inglés (PAI) en el centenar de centros educativos ya adheridos, así como de autorizar que estos colegios continúen ofertando el PAI a los nuevos alumnos que el próximo mes de febrero realizarán la prematricula para el curso 2016-17.
Por otro lado, el consejero ha avanzado que "la incorporación de nuevos centros al programa de tratamiento integrado de lenguas estará sometida a los resultados de un proceso de evaluación que ya se ha puesto en marcha y que continuará durante los próximos años". (klik egin-ver más)
Diario de Noticias

LUCES Y SOMBRAS DEL 20-D 2015

La digestión del torrente de datos que nos suministra la noche electoral desemboca en primer término en la perspectiva de una situación muy difícilmente gobernable en el Estado. Y en un reequilibrio, tanto entre los espacios teóricos de la derecha y de la izquierda, como entre los del modelo de estado, de forma que las manifiestas intenciones recentralizadoras de muchos van a tener más dificultad de la prevista para materializarse. Considerando la oferta existente, es buena noticia el éxito de Podemos, que además de confirmar su pujanza en los grandes núcleos urbanos, coloca picas en Flandes en territorios hasta ahora privados del bipartidismo, como Baleares, la Rioja, Cantabria, Extremadura o Castilla-León, y confirma las expectativas creadas mediante experiencias unitarias transversales junto a coaliciones que buscan la profundización del autogobierno en el ámbito de sus comunidades, como en el País Valenciano o Galicia. Los resultados de la CAV denotan también que el electorado ha premiado a la moderación y al posibilismo en el contexto de bipolarización provocado en Catalunya.

En Navarra, más allá de la espectacular irrupción de Podemos hasta el punto de hacerse con dos escaños, hay que hacer constar que la correlación entre los tres grandes bloques políticos existentes (derecha, PSOE y las fuerzas que están inequívocamente por el cambio) no sufre alteraciones esenciales, aunque sí, por supuesto, en la composición interna del tercero de los bloques.

Si la comparación la establecemos con las generales de hace cuatro años, la derecha en su conjunto, incluyendo ahora a Ciudadanos, retrocede ligeramente en votos con una participación cinco puntos mayor, con lo que la pérdida porcentual es sensible. De manera similar a lo que pierde en la Rioja o en Aragón, por acudir a ejemplos cercanos. El PSOE desciende, quizás algo menos de lo previsto, y la suma de las fuerzas del cambio arroja un incremento de unos 50.000 votos. Las razones del desplazamiento de buena parte del voto vasquista y abertzale hacia Podemos, al margen de la naturaleza de los comicios y el imperio de las cadenas estatales de televisión, las situaría yo en el clamor contra la desigualdad social y en la priorización de la defensa del estado de bienestar que sectores populares con un futuro oscuro han podido fijar para esta convocatoria por encima del factor navarro. Para ver si se mueve algo allá donde se toman las decisiones legislativas más trascendentales en el terreno socio-económico.

Pero en cuatro años han pasado aquí muchas cosas, por lo que resulta inevitable la referencia a las recientes elecciones forales de mayo para cotejarlas con estas. A pesar de la manifiesta removilización de la derecha tras unos meses de cierto aturdimiento tras la pérdida del poder, los cambios globales entre los tres bloques son muy escasos. Aunque la suma UPN-PP pierde 5.000 votos, la subida de Ciudadanos lo compensa, con lo que en su conjunto sube punto y medio porcentualmente. El PSN-PSOE, en el tipo de convocatoria que siempre le resulta más favorable, avanza un punto respecto a mayo, mientras  que el bloque del cambio retrocede poco más de punto y medio, del 47'44% al 45'70%. Aunque indudablemente se harán desde diversos ángulos ideológicos lecturas sobre el traspiés del nacionalismo, no aparecen motivos justificados para cuestionar la legitimidad del gobierno surgido de las elecciones de mayo.

Pero los resultados de esta noche no se pueden dar por comentados si no incluímos los del Senado. Porque se trataba de un desafío lanzado desde la órbita política del cuatripartito, con lo que la derrota se ha convertido en la mayor frustración de la noche. Una apuesta precipitada por no haber valorado antes los obstáculos que habría en el camino: el desprestigio de la propia institución del Senado; las trabas legales para la distribución de papeletas de una marca nueva creada apresuradamente; la dificultad para los partidos de gestionar dos elecciones a la vez; y el muy distinto grado de motivación de los socios. Así hemos asistido a una desangelada campaña de última hora, con frías presentaciones como para cumplir el trámite, dando el éxito poco menos que por descontado, sin apenas publicidad, y la mayor parte de la ciudadanía no ha llegado a enterarse ni siquiera del nombre de la candidatura. Quien esto suscribe ya puso públicamente de manifiesto su temor en la presentación de Aldaketa que tuvo lugar el miércoles 18 en Tafalla. Los resultados cantan. Frente a UPN, que prácticamente ha clavado sus resultados del Congreso, las cuatro fuerzas, que suman 160.000 votos al Congreso, no han alcanzado para ninguno de los tres aspirantes, los 100.000. De esos más de 60.000 votos que faltan, sólo la décima parte ha podido ir al PSOE. El resto se ha perdido por apatía y desinformación. Un vistazo a los resultados por localidades es suficiente para comprobar que allí donde la composición de la suma a las cuatro fuerzas es muy favorable para Podemos, el porcentaje de aprovechamiento para el Senado es más bajo. En Tudela, Corella, Castejón, Noain, no se llega al 50% de la suma, mientras que aumenta más en la medida en que el voto abertzale es mayor, hasta situarse en porcentajes próximos al 80% en localidades como Goizueta, Leitza o Etxarri Aranatz. Pero sería una simplificación atribuirlo únicamente a la escasa implicación de la dirección de Podemos Navarra, aunque algo de eso pueda haber habido. Porque en Castejón, por ejemplo, ni siquiera se alcanza la suma de las otras tres fuerzas. Las deficiencias organizativas han tenido un peso decisivo, pero hay que buscar las razones políticas, que sin duda también concurren en este fracaso, que se va a tratar de utilizar para sembrar dudas sobre la solidez del acuerdo progresista de cambio y para propinar un golpe psicológico al gobierno de Uxue Barkos.

Buena será la experiencia si sirve para reflexionar y para establecer bases sólidas de funcionamiento en la relación entre los socios de gobierno, no sólo en lo pogramático, donde el nivel de coincidencia a día de hoy parece más que aceptable, sino también en la comunicación y en la articulación del seguimiento del pacto, que responde a la voluntad de la mayoría social, ajustada pero mayoría, de la ciudadanía navarra. Y cada grupo se tendrá que preguntar si su organización y funcionamiento internos responden a las pautas de horizontalidad que hacen más efectiva y más profunda la acción política.

Praxku