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Al menos una cigüeña se ha instalado ya en un nido de la torre del Parador de Olite, objeto de polémica por su eventual retirada y que ha suscitado la reacción de algunos vecinos que han recogido unas 600 firmas para oponerse a que se desmantele la morada que desde hace décadas ocupan de las zancudas. El ave llegó con los Magos de Oriente y dejó, como todos los años, una imagen de postal que algunos quieren que desaparezca, posibilidad complicada ahora dada la legislación que protege a las cigüeñas, sobre todo, una vez que han anidado.
Los impulsores de la protesta anunciaron que iban a presentar las firmas en el departamento de Medio Ambiente, en Príncipe de Viana, ante la dirección del Parador de turismo y en el Ayuntamiento. La eventual retirada de los nidos ha provocado la reacción de los opositores que entienden que las aves no ponen en peligro el edificio y que, bien al contrario, "dan alegría y personalidad al entorno". Recuerdan, también, que la cigüeña es una especie que costó mucho tiempo asentar en el pueblo después de un período, hace décadas, en el que prácticamente habían desaparecido.
El Olitense
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