Las emisiones de CO2 de Navarra han aumentado más de un 78, 31% desde 1990, cuando el objetivo era del 15%. Se encuentra en el grupo de las Comunidades Autónomas que están dando la espalda Kioto junto con, Andalucía, Canarias, Valencia, Murcia y la Rioja.
El acuerdo tomado dentro de la UE a partir de un objetivo común para cumplimiento del Protocolo de Kioto sólo le permitía a España emitir en 2010 un 15% más que en 1990 y ya emite un 50% más que entonces. Las políticas adoptadas en algunas comunidades autónomas no están facilitando acercarse a dichos compromisos. Navarra junto con Andalucía, Canarias, Valencia, Murcia y La Rioja son las autonomías que más han aumentado sus emisiones (todas por encima del 78%) entre 1990 y 2006.
El Ministerio de Medio Ambiente, que había mantenido hasta ahora ocultos estos datos por comunidades, acaba de publicar la información correspondiente hasta el año 2006, que no siempre coincide con los que elaboran algunas autonomías. Así los datos del Ministerio colocan a la Comunidad Foral en un 78,31%, de aumento, mientras que los datos del Plan Energético del Gobierno de Navarra, mucho más benevolente, sitúan este aumento en un 70,69 en ese mismo año.
El espectacular desarrollo de las energías renovables, ocultan una paradójica realidad, Navarra aumenta desmesuradamente su consumo energético y las emisiones de CO2 tras la puesta en marcha de las centrales térmicas de Castejón, que nos han alejado hace tiempo del camino de la sostenibilidad. Pese a ser la comunidad insignia en la generación con energías renovables la evolución de las emisiones de CO2 no ha parado de crecer hasta llegar a emitir casi 8 millones de toneladas de CO2 en el 2006, cuando en el año de referencia para Kioto 1990 no llegaba a los 4,5 millones, según estos datos del Ministerio de Medio Ambiente.
Navarra también tiene uno de los ratios de emisión más altos de España por habitante. Cada español emite de media 9,69 toneladas de CO2 al año, y cada navarro 13,11. El resultado de este nulo compromiso con Kioto tendrá como consecuencia que harán falta más de 3.000 millones de euros para pagar en cupos de emisión del estado español.
(Ecologistas en Acción)
(Ecologistas en Acción)
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