sábado, 7 de agosto de 2010

OPOSICIÓN DE ENFERMERÍA

Es costumbre en estos lares que las chapuzas de gestión del Gobierno de UPN acaben enterradas en el desván de los olvidos. Ya los denuncien instituciones responsables de velar por la transparencia y la calidad democrática de la gestión de los bienes comunes como la Cámara de Comptos -y ahí sigue, por ejemplo, el informe que denuncia el sobrepago de 55 millones por las obras de la Autovía del Camino sin que nada haya ocurrido ni haya habido responsabilidad alguna-, ya lo hagan los tribunales de justicia. Pero esas tropelías tienen consecuencias directas sobre la sociedad navarra, como en el caso de la última oposición de Enfermería. Entre diez y 20 personas pueden perder la plaza que habían obtenido en las oposiciones y otras más verán cambiado el destino que habían logrado porque Salud se negó a cumplir la ley y baremar el euskera como mérito en la zona mixta -no tuvo reparo alguno en primar el inglés, el francés y el alemán-. Los tribunales le han obligado a rectificar y ahora la injusta y consciente decisión política de UPN -una actitud que si no lo es, se parece mucho al delito de prevaricación- extiende la incertidumbre laboral a ciudadano@s, más aún ante la imposibilidad legal de ampliar el número de plazas ofertadas inicialmente. Pero que se sepa ningún alto cargo de Salud (María Kutz) o Presidencia (Javier Caballero) -ahora se echa un departamento a otro la responsabilidad del desaguisado- ha entendido que de esa chapuza se pueda derivar responsabilidad política personal alguna. Aquí, paz y gloria.

Joseba Santamaría, en Diario de Noticias

No hay comentarios:

Publicar un comentario