viernes, 24 de septiembre de 2010

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Nadie en su sano juicio puede defender la trata de seres humanos ni la esclavitud. Pero el debate planteado por UPN es otro. Porque la ley planteada no pretende perseguir la trata de seres humanos, esta ley sólo pretende aprovecharse de un tema sensible para sacar rendimiento electoral. Por eso se utilizan conceptos con gran impacto emocional, sólo con un fin electoralista. Porque si no UPN, desde su posición unívoca en torno al trabajo sexual, presentaría una ley para prohibir la prostitución y perseguir a los clientes, pero no lo hace, porque la defensa de la dignidad de la mujer no es el objetivo principal, son otras las razones para empeñarse en que esta chapucera ley se apruebe. (klik egin-ver más)

Ioseba Eceolaza, parlamentario foral de NaBai (en Diario de Noticias)

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