Unos 200 jóvenes se manifestaron el sábado en Tafalla contra la posible aprobación de una normativa que regulará los alrededor de 40 garitos, txokos y bajeras de la localidad. Bajo el lema "Estamos donde nos quieren, en la calle", criticaron la imposición de una licencia que deberá ser renovada anualmente, la necesidad de instalar baños o salidas a pie de calle, la identificación de todos los integrantes del local y la exigencia de pasar una inspección anual. La alcaldesa, Cristina Sota, explicó que "es cierto que se está trabajando en un borrador para cubrir las demandas de los vecinos, pero no es verdad que queramos que desaparezcan los garitos, sino todo lo contrario". Diario de Noticias
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