Cuando hice la canción de la bofetada y gente desconocida me quería tanto, sabía que esa situación iba a ser un espejismo, porque igual que me metía con la Yoli, me iba a seguir metiendo con todo aquello que me pareciera mal. Y que eso, no hace amigos. Fue un tiempo único en mi vida, en que se me quería por lo que decía. Pero yo no he nacido para dar pomada, en general. Si para algo sirvo es para ponerle nombre a las cosas, y a veces el nombre es vaselina. Pero otras veces, los nombres pinchan, escuecen, rajan...
Despues de estos años dando mi opinión en facebook, he ganado lectores incondicionales. Y muchas veces me los he encontrado por las calles, y nos abrazamos, como si ya nos conociéramos de algo. Normalmente son gente humilde. Y a mi me da mucho gusto que gente así, me de su reconocimiento. Nunca me gustaron las élites, de ningún tipo. Y eso que, si quisiera, me manejaría bien navegando la élite. Buscando dinero u otros favores a mi provecho. Pero para esto, también hay que valer.
La Chula Potra
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