viernes, 22 de julio de 2011

LAS ÚLTIMAS FRONTERAS


José Maya de pequeño soñaba con el Himalaya. Los ojos del niño que en la década de los 50 posa en una fotografía escolar en la escuela de Pueyo, con un mapa de España de fondo, soñaba con las montañas más altas del planeta, con remotas tierras, parajes vírgenes que se le antojaban inalcanzables. Un un día, ya adulto, ese sueño se materializó, y desde entonces todos los agostos viaja hasta esos otros mundos en los que el tiempo parece detenerse, la existencia cobrar otro sentido, escapadas en las que recargar las pilas para el resto del año y que él ha abrazado como forma de vida. (klik egin-ver más)
La Voz de la Merindad

No hay comentarios:

Publicar un comentario